lunes, diciembre 19, 2005

Cargos de des…confianza

La aprobación de las cuentas municipales pone al descubierto, un año sí y otro también, la desproporcionalidad existente en el Consistorio getafeño. Los sueldos y complementos percibidos por los cargos de confianza hacen de este grupo de asalariados un cuerpo de “élite” en la administración local. Ellos solos (no llegan a la centena) se van a “comer” en 2005 un 5 por ciento de las cuentas del Ayuntamiento; o lo que es lo mismo, más de dos millones y medio de euros (450 millones de las antiguas pesetas). Y que conste que no sumamos los cerca de 80 jefes de diferentes secciones (merecen capítulo aparte), pues éstos, a su sueldo oficial, añaden importantes “bufandas” por disponibilidad y destino.

Cinco de cada cien euros que entren en las arcas municipales irán a parar al bolsillo de estos cargos, contratados a dedo y cuya labor suele estar en entredicho. Los sindicatos se han hartado de criticar el imparable aumento de esta modalidad laboral, pues engordan de manera alarmante el capítulo de personal en el Ayuntamiento y su rendimiento es inversamente proporcional a los sueldos que perciben.

¿Para qué necesitan los vecinos de Getafe un coordinador de Acción en Barrios? ¿Y otro de Casas Regionales? ¿Son imprescindibles para el normal funcionamiento de la ciudad? Directores, jefes, coordinadores... todos ellos copan los cargos intermedios en la escala de mando en el Ayuntamiento. Trabajan en sintonía con los concejales respectivos y son quienes “apagan” los posibles fuegos en el quehacer cotidiano de los políticos.

Y si la labor es muy similar ¿para qué necesita la ciudad que dos personas cobren por ejecutar acciones parecidas? Así no es de extrañar que el apartado de personal del Ayuntamiento suba cada año de manera espectacular, mientras se recortan partidas en otros puntos que podrían ser también importantes a la hora de hacer ciudad. Los pequeños detalles son los que suelen hacer grandes a los políticos y aquello que representan. Y la ciudad está necesitada de esos pequeños detalles que cada legislatura van quedando aparcados porque las partidas municipales no contemplan gasto alguno para esos conceptos.

Es mejor pagar favores políticos y seguir manteniendo un control férreo de la vida municipal. Claro que, lo mejor, no siempre resulta lo más efectivo.

Una reducción de los cargos de confianza, hasta situarlos en su justa medida, no sólo supondría aliviar las maltrechas arcas de la administración local, sino daría también un golpe de efecto importante en la opinión pública y en la imagen que los ciudadanos tienen del funcionamiento del Consistorio.

Hay empresas privadas que para devolver favores prestados a lo largo de los últimos años a través de adjudicaciones y trabajos para el Ayuntamiento a buen seguro no tendrían problema alguno en acoger a estos trabajadores. La duda esa: ¿les importaría a ellos?

jueves, diciembre 01, 2005

Ayuntamientos excelentes

El Ayuntamiento de Alcobendas acaba de recibir la Medalla de Oro Excelencia y Calidad, que concede el Club de Excelencia en Gestión. La importancia de esta distinción radica en que en nuestro país tan sólo hay once organizaciones que la posean y en el caso de las Administraciones locales, los Ayuntamientos de Alcobendas y Liverpool son los únicos que han recibido el reconocimiento.

Este es un dato que pone de manifiesto la importancia del servicio al ciudadano para cualquier administración, pero mucho más en el caso de la más cercana al vecino, la local. Una apuesta seria y comprometida por ofrecer servicios de calidad y facilitar la vida al vecino es sinónimo de recompensa. De ahí la distinción de Alcobendas.

Es este Ayuntamiento ejemplo de proporcionalidad y funcionalidad. Desde un nivel de exigencia muy por encima del que se ofrece en la mayoría de consistorios, nos encontramos con un concepto vanguardista en lo relativo a la relación ayuntamiento-ciudadanos.

Pero hay más. La apuesta por las nuevas tecnologías de la información han convertido a Alcobendas en el único municipio español que ha conseguido instalar un puesto cibernético de servicios en la sede de Naciones Unidas en Nueva Cork. Casi nada. Está claro que el modelo funciona y que los réditos políticos están a la vista.

No es Alcobendas el único municipio madrileño que apuesta por la sociedad de la información y la aplicación de las nuevas tecnologías. Con el calificativo de “Ciudad digital”, Leganés ha realizado una inversión importante en la aplicación de nuevas formas de comunicación. Internet y todo lo que la red de redes ofrece ha permitido que Leganés se coloque a la vanguardia de la información digital. La aplicación de programas que facilitan la labor de trabajadores municipales y vecinos, a través de cursos formativos, obtención de certificados on line, conexiones seguras… diferentes materias que hacen de Leganés un portal virtual.

Pinto, en su afán por crecer en cantidad y calidad, también ha hecho un importante esfuerzo en materia de comunicación e Internet, al igual que Fuenlabrada, que trabaja en la mejora de la accesibilidad de sus recursos informáticos y tecnológicos a personas con discapacidad.

Otras localidades como Pozuelo, Boadilla o Majadahonda también han mostrado una especial visión en todo lo relativo a las nuevas tecnologías de la información
Esta línea de preocupación por hacer de la comunicación y el servicio al ciudadano una de las principales áreas de trabajo es obligación de las Administraciones.

El rápido y constante avance de la sociedad obliga a un esfuerzo complementario a la hora de planificar el modelo de gestión en cada localidad y poner todos esos avances a disposición de la ciudadanía.

La “excelencia” no es sino una muestra de aplicar los recursos municipales a las necesidades de la población. Todos los premios que nuestros ayuntamientos reciban por este motivo servirán para corroborar que se va por el camino correcto.