La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha puesto en tela de juicio las funciones que los Ayuntamientos están aplicando a los agentes de seguridad de las denominadas “Bescam”. Es más, la presidenta ha asegurado que muchos municipios están incumpliendo el convenio de colaboración pactado con el Ejecutivo regional, mediante el cual los agentes incorporados desde este cuerpo sólo se dedicarían a cuestiones relativas a seguridad. Vamos, que han visto a los policías “apatrullando” los paseos donde hay vehículos mal estacionados, controlando el acceso de escolares a centros de enseñanza y velando por evitar el colapso circulatorio en algunas rotondas junto a grandes centros comerciales.
Aguirre no está dispuesta a que la iniciativa de las “Bescam”, para la que ha destinado esfuerzo y dinero, sea ninguneada desde los Ayuntamientos, especialmente aquellos gobernados desde la izquierda. Tal es su enfado con el papel que juegan los policías regionales, que ha sido la primera en llamar a capítulo a varios alcaldes del PP. Para que cunda el ejemplo. Es más, para vigilar que se cumpla todo aquello que se ha firmado, no ha dudado en crear una Dirección de Seguridad que se encargará de hacer seguimiento de los agentes que refuerzan las plantillas propias de los Consistorios. No quiere que nadie “juegue” con este asunto.
¿Y en Getafe?
Desde el Ayuntamiento se asegura que el convenio se cumple con creces. El concejal de Seguridad, David Lucas, cifra en un centenar los agentes que a diario se dedican a labores de seguridad ciudadana, casi la mitad de los integrantes de la plantilla. A pesar de ello, hay voces discrepantes y quienes afirman tener “fichados” a los “bescam” que hacen de reguladores de tráfico.
En cualquier caso y dados los antecedentes, es lógico poner en duda las aseveraciones del concejal. Quejas por el destino de los nuevos policías de Seguridad Ciudadana han surgido desde el mismo momento que pisaron el municipio.
La primera de las protestas estuvo relacionada con los nuevos vehículos, los de color rojo y azul. Decían que sólo salían a patrullar de noche para que el efecto de estos nuevos coches no causase impacto visual entre los vecinos y vecinas de la ciudad. Modelos modernos y tan llamativos, frente a los usados ya por la Policía Local causan una comparación inevitable.
Poco después y ante la rotulación de dichos vehículos, tanto coches como motos, el Ayuntamiento ha ampliado el número de emergencias que figura en la carrocería, ya que la Comunidad sólo había incluido el 112 para emergencias. Getafe decidió añadir el 092 para “cumplimentar” las opciones; eso sí, de tamaño mucho mayor que el rotulado en origen.
Amén de las triquiñuelas con el uso y destino de los nuevos vehículos y policías, lo cierto es que la incorporación de las “Bescam” ha servido para que Getafe incumpla el convenio por otros motivos. Los sindicatos policiales denuncian que desde hace dos años no se ha creado ni una sola plaza policial con cargo a los presupuestos municipales, ni siquiera se han cubierto las de aquellos agentes jubilados”.
De estas acusaciones se desprende que el proyecto regional de Seguridad Ciudadana le ha venido a nuestra localidad o, al menos, a los responsables municipales, como agua llovida del cielo. De ahí que el propio Lucas no haya tenido más remedio que reconocer que está “satisfecho” de los resultados de la incorporación de los agentes de las “Bescam”.
Eso sí, con flores o sin flores, con reconocimiento o sin él, desde el Gobierno regional se va a seguir con lupa la actuación de los policías y, en especial, el dinero que desde Madrid se destina a municipios como Getafe.
En materia de seguridad sería importante y aconsejable que nadie intente sacar ventaja política. Por muy difícil que a algunos les resulte.
viernes, junio 30, 2006
Candidatos a candidato
Las elecciones municipales del mes de mayo del año próximo van a poner mucho en juego en nuestra localidad. De ahí que las tres formaciones políticas con representación en el Ayuntamiento (PSOE, PP e IU) hayan puesto sus miras en esa fecha como punto de referencia obligado a la hora de trabajar. Pero antes de saber qué se cocina en la trastienda de cada partido, es de suma importancia conocer quién va a ser el encargado de dirigir el ritmo de los fogones. Los candidatos serán la imagen visible de cada formación y quienes marquen la pauta a seguir, no sólo a sus afiliados, sino a toda la ciudadanía, pues ella será, en definitiva, la que tendrá la última palabra en la cita con las urnas.
Ha sido Izquierda Unida la primera formación en dar a conocer su cabeza de lista para esas elecciones locales. Ignacio Sánchez Coy, actual portavoz de la coalición en el Ayuntamiento de Getafe, va a suplir a Laura Lizaga en los carteles. Coy ha contado con el apoyo casi unánime de IU en el municipio y ya ha empezado a trabajar para marcar las directrices del programa con el que piensa concurrir a los comicios.
Si de apostar se trata, y por mal que nos parezca, no arriesgamos mucho al apuntar que no habrá imagen femenina en el primer puesto de la lista de ninguno de los partidos. La presencia de Lizaga en las elecciones de 2003 hay que entenderla, pues, como un intento de lo que pudo ser y no fue a la hora de encontrar una alcaldesa para una de las ciudades más importantes de la corona sur metropolitana.
Los esfuerzos, en este sentido, se centran en acoplar mujeres en los segundos puestos. Y ahí es donde han empezado a surgir múltiples conflictos internos, con el baile de concejales que no están dispuestos a perder su estatus actual a costa de cumplir con la paridad que desembocará en las denominadas listas cremallera.
Con este panorama resulta evidente que quienes rigen ahora los destinos de los principales partidos en Getafe sean los que más papeletas tengan a la hora de volver a ser candidatos por sus respectivas formaciones. ¿Seguro?
En el PSOE el sempiterno Pedro Castro ya trabaja para volver a caer de pie en 2007. Pese a las críticas externas e internas que ha despertado su gestión en esta legislatura (incluso sus militantes reconocen que poco a nada se ha hecho en estos últimos cuatro años de mandato socialista) queda poco tiempo para “vender” a la ciudadanía otra cara que no sea la del actual primer edil en el cartel electoral del puño y la rosa.
Además, los inciertos resultados que han arrojado las últimas encuestas que se han hecho públicas en la ciudad han servido para generar más incertidumbre en las filas socialistas, temerosas de lo que podría significar perder el poder, no sólo para los cargos electos, sino para todos aquellos militantes que, de una u otra manera, se han refugiado a la sombra del carro del mandato castrista para vivir de los recursos de “papá ayuntamiento”.
Para Pedro Castro sería un auténtico desastre abandonar la política después de haber perdido unas elecciones, pero más desastroso aún sería para el PSOE dejar la segunda planta de la Casa Consistorial por haber cambiado de candidato. No obstante, en la calle Cuenca afirman manejar unas encuestas en las que aparecen como ganadores de las elecciones con la mayoría suficiente para no hacer uso de Izquierda Unida como socio obligatorio de gobierno ¿?
Por su parte, la apuesta del Partido Popular por Getafe está clara. Nunca han estado tan cerca de poder morder la roja manzana del ayuntamiento y desde Génova han decidido volcarse, después de que la mismísima Esperanza Aguirre pusiese a Getafe, entre otras localidades, en el centro de la diana a la que van a disparar los populares.
La campaña de imagen de José Luis Moreno y su trabajo constante de desgaste del Gobierno municipal está haciendo mella en el municipio. Es más, en diferentes ocasiones es el propio Gobierno el que ejerce de oposición a la oposición, al ir a remolque en denuncias y peticiones.
En otras localidades de la Comunidad de Madrid en las que el PP puede hacerse con la alcaldía, arrebatándosela a los socialistas o en las que las encuestas, pese a gobernar, no les son del todo favorables, los populares van a apostar por primeros espadas. Hay quien habla de Isabel Tocino o Carlos Mayor Oreja para aparecer en la foto de dos carteles electorales municipales.
En Getafe todavía no ha sido designado el cabeza de lista del PP, partido en el que sólo se ha designado por aclamación a Esperanza Aguirre en la Comunidad, algo más que evidente dado el importante peso específico que la presidenta tiene en el partido, no sólo en Madrid, sino a nivel nacional. No parece que Moreno quede fuera del cartel en Getafe, pese a algunas voces que lo ponen en duda. Y menos después de ver los resultados que han hecho públicos recientemente y en los que los populares saldrían vencedores si las elecciones se hubiesen celebrado ahora.
Los candidatos a candidato (a excepción de Ignacio Sánchez Coy, que ya ha superado ese proceso) deberán esperar hasta después del verano para que se hagan oficiales sus nombres como aspirantes al sillón de la alcaldía. Hasta entonces, las especulaciones van a ser caldo de cultivo en el entramado social, económico y político de la localidad. Eso sí, sólo ellos y su trabajo van a estar en posesión de la verdad.
Ha sido Izquierda Unida la primera formación en dar a conocer su cabeza de lista para esas elecciones locales. Ignacio Sánchez Coy, actual portavoz de la coalición en el Ayuntamiento de Getafe, va a suplir a Laura Lizaga en los carteles. Coy ha contado con el apoyo casi unánime de IU en el municipio y ya ha empezado a trabajar para marcar las directrices del programa con el que piensa concurrir a los comicios.
Si de apostar se trata, y por mal que nos parezca, no arriesgamos mucho al apuntar que no habrá imagen femenina en el primer puesto de la lista de ninguno de los partidos. La presencia de Lizaga en las elecciones de 2003 hay que entenderla, pues, como un intento de lo que pudo ser y no fue a la hora de encontrar una alcaldesa para una de las ciudades más importantes de la corona sur metropolitana.
Los esfuerzos, en este sentido, se centran en acoplar mujeres en los segundos puestos. Y ahí es donde han empezado a surgir múltiples conflictos internos, con el baile de concejales que no están dispuestos a perder su estatus actual a costa de cumplir con la paridad que desembocará en las denominadas listas cremallera.
Con este panorama resulta evidente que quienes rigen ahora los destinos de los principales partidos en Getafe sean los que más papeletas tengan a la hora de volver a ser candidatos por sus respectivas formaciones. ¿Seguro?
En el PSOE el sempiterno Pedro Castro ya trabaja para volver a caer de pie en 2007. Pese a las críticas externas e internas que ha despertado su gestión en esta legislatura (incluso sus militantes reconocen que poco a nada se ha hecho en estos últimos cuatro años de mandato socialista) queda poco tiempo para “vender” a la ciudadanía otra cara que no sea la del actual primer edil en el cartel electoral del puño y la rosa.
Además, los inciertos resultados que han arrojado las últimas encuestas que se han hecho públicas en la ciudad han servido para generar más incertidumbre en las filas socialistas, temerosas de lo que podría significar perder el poder, no sólo para los cargos electos, sino para todos aquellos militantes que, de una u otra manera, se han refugiado a la sombra del carro del mandato castrista para vivir de los recursos de “papá ayuntamiento”.
Para Pedro Castro sería un auténtico desastre abandonar la política después de haber perdido unas elecciones, pero más desastroso aún sería para el PSOE dejar la segunda planta de la Casa Consistorial por haber cambiado de candidato. No obstante, en la calle Cuenca afirman manejar unas encuestas en las que aparecen como ganadores de las elecciones con la mayoría suficiente para no hacer uso de Izquierda Unida como socio obligatorio de gobierno ¿?
Por su parte, la apuesta del Partido Popular por Getafe está clara. Nunca han estado tan cerca de poder morder la roja manzana del ayuntamiento y desde Génova han decidido volcarse, después de que la mismísima Esperanza Aguirre pusiese a Getafe, entre otras localidades, en el centro de la diana a la que van a disparar los populares.
La campaña de imagen de José Luis Moreno y su trabajo constante de desgaste del Gobierno municipal está haciendo mella en el municipio. Es más, en diferentes ocasiones es el propio Gobierno el que ejerce de oposición a la oposición, al ir a remolque en denuncias y peticiones.
En otras localidades de la Comunidad de Madrid en las que el PP puede hacerse con la alcaldía, arrebatándosela a los socialistas o en las que las encuestas, pese a gobernar, no les son del todo favorables, los populares van a apostar por primeros espadas. Hay quien habla de Isabel Tocino o Carlos Mayor Oreja para aparecer en la foto de dos carteles electorales municipales.
En Getafe todavía no ha sido designado el cabeza de lista del PP, partido en el que sólo se ha designado por aclamación a Esperanza Aguirre en la Comunidad, algo más que evidente dado el importante peso específico que la presidenta tiene en el partido, no sólo en Madrid, sino a nivel nacional. No parece que Moreno quede fuera del cartel en Getafe, pese a algunas voces que lo ponen en duda. Y menos después de ver los resultados que han hecho públicos recientemente y en los que los populares saldrían vencedores si las elecciones se hubiesen celebrado ahora.
Los candidatos a candidato (a excepción de Ignacio Sánchez Coy, que ya ha superado ese proceso) deberán esperar hasta después del verano para que se hagan oficiales sus nombres como aspirantes al sillón de la alcaldía. Hasta entonces, las especulaciones van a ser caldo de cultivo en el entramado social, económico y político de la localidad. Eso sí, sólo ellos y su trabajo van a estar en posesión de la verdad.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)