viernes, diciembre 15, 2006

No son las encuestas, es algo que se palpa en el ambiente

Recientemente casi todos los medios de comunicación locales (excepto los que no se atreven a hablar de política) se han hecho eco de una encuesta que Sigma Dos ha realizado para el periódico EL MUNDO y, por extensión, para la empresa de uno de sus ex columnistas tradicionales, Raúl Heras. En su periódico CRONICA ha puesto sobre la mesa la opinión que los encuestados tienen de la política local y de los políticos; los que gobiernan y los que aspiran a hacerlo.

En el caso concreto de Getafe, y el rotativo lo apunta en su titular de portada, la figura del alcalde, Pedro Castro, sale mal parada. Aunque todo es relativo, un universo de 400 encuestas es como para tomárselo en serio. Si yo fuera Castro (¡válgame!) me lo pensaría dos veces después de leer los resultados de la encuesta.

Dice Sigma Dos que más de la mitad de los getafenses (un 50,5 por ciento) no quiere que Pedro Castro repita como alcalde de la ciudad. Más de un treinta por ciento sí le quiere en el cargo y el resto se decanta por el ns/nc o, lo que es lo mismo, pasa de todo, ¿no?

Y pese a que hay más getafenses-getafeños que tienen una valoración positiva del regidor, los números hay que tomarlos con la frialdad matemática, sin pasión y como vienen dados.
Ahora bien, en esta ocasión, todo indica que la muestra que publica CRONICA ha dado de lleno en la diana. Como dice un conocido anuncio de una marca de relojes: no es lo que tengo, es lo que soy. Y, hoy por hoy, son muchos los vecinos que no quieren la continuidad de Pedro Castro.
Lejos de la cifra, por sorprendente que parezca, la realidad puede llegar a superar a la ficción si nos fijamos en el sentir de la ciudadanía. Basta con pulsar la opinión en los diferentes barrios de Getafe para darnos cuentas que algo de lo publicado se palpa en el ambiente.

Nuestra doble condición (la de juntaletras y la de vecino de esta abandonada ciudad) nos permite, más por suerte que por desgracia, estar cerca de quienes forman y conforman lo que es Getafe hoy en día. (perdonen el plural mayestático, pero no he querido personalizar, sino dar a conocer la opinión de otros compañeros periodistas de Getafe). Es público y notorio que el descontento se ha generalizado y que el número de vecinos y vecinas de Getafe contrarios a la gestión de Castro aumenta día a día.

Es su figura la más criticada, por mucho que los números hablen de un menor encuentro entre la ciudadanía y el Gobierno local (muchos no saben la composición ni las figuras que lo integran, ni les importa en exceso) y siga siendo Pedro Castro el político más conocido. Su política personalista le ha tenido en todos los frentes de forma puntual (el novio en la boda, el niño en el bautizo y el muerto en el entierro, que dice el refranero popular) y ha impedido a compañeros de partido, socios de Gobierno y a la oposición probar un bocado de la fama política.

Luego las urnas serán las que decidan, pero ahora, a cinco meses vista, y con una lista electoral por definir (hablaremos de las alternativas y de la pelea interna por hacerse un hueco en otro post) la situación es la que es y viene como viene. Castro lo sabe, por mucho que se niegue a reconocerlo. El sentir popular esboza una muesca de desencanto, de amargura y de enfado con la persona del primer edil. Además sus manifestaciones de los últimos meses no le han ayudado, ni en público, ni en privado.

Reconocer que compañeros y amigos suyos se han hecho millonarios con el negocio del ladrillo supuso abrir la caja de Pandora. Sobre todo, porque muchas de las decisiones políticas que les han permitido enriquecerse (“es algo legal, pero no ético”, Pedro Castro dixit) se han llevado a cabo con el beneplácito del Gobierno municipal, que él preside.

La pelea soterrada que PSOE e IU mantienen, pese a ser socios en el Ayuntamiento, tiene en el propio Pedro Castro a uno de sus principales protagonistas y, si no, sus manifestaciones y quejas constantes acerca de la situación de la limpieza en Getafe (en manos de IU) son el más claro ejemplo.

Es difícil contentar a todos, pero más complicado es desencantar a la mayoría de los ciudadanos. Castro lo ha conseguido, según Sigma Dos. Pero, lo que es peor para él, el sentimiento generalizado provoca la sensación de un drama aún mayor.

Que lo anote, con letras bien gordas, en su cuaderno. Si quiere.

domingo, noviembre 19, 2006

Cuestión de matemáticas

El número 2. Qué importante para determinadas cuestiones y qué banal resulta a veces. Es tan común que en muchas ocasiones le pasamos por alto, le ignoramos y hasta le despreciamos, así sin más.

En su acepción cardinal el 2 es del todo útil. Nos ayuda con las matemáticas e, incluso, sirve para que en “Barrio sésamo” enseñen a nuestros “peques” a cantar la “Canción del 2”. Además, el 2 es el único número primo par, con la enjundia que este título le otorga a la cifra.

Sin embargo es el valor ordinal del 2 el que más se utiliza en términos políticos: el número 2 como segundo. Cuántas veces hemos escuchado al nombrar a ése o aquel político: “es el segundo de…”. El hecho de aparecer en una lista inmediatamente detrás del “cartel electoral” confiere, en ocasiones, cartel de “segundón” a quien porta el número 2.

Es un dato, si me apuran, hasta cruel, que cobra inusual vida en Getafe y, en concreto, en clave socialista. El número 2 es maldito en el PSOE local. Quien lo ha portado, a lo largo de los últimos 25 años, se ha quedado con un palmo de narices al ver que el primer lugar se les quedaba lejos, muy lejos. Desde que Pedro Castro saltó del número 2 del PSOE local para cubrir el hueco que dejó la marcha del por entonces alcalde Jesús Prieto (a quien Castro, por cierto, ha querido pagarle ahora ese favor al nombrarle hijo adoptivo de la ciudad) a la MERCASA del conglomerado de empresas públicas creadas por el Gobierno de Felipe González, nadie ha podido ser más que segundo, o “segundón”.

Y Pedro Castro se ha encargado de “rebozarles” en su cara la condición de segundos a la mayoría de compañeros que han estado en esa posición. En el número 2. Cada vez que algún “segundo” ha intentado dar el salto, la estrategia política del todavía alcalde, ha terminado por cortarle las alas. Lo hizo con Francisco Hita hace ahora cuatro años y lo ha hecho en esta última legislatura con David Lucas.

Con el primero fue especialmente cruel al preguntar en tono jocoso en diferentes foros públicos cuál iba a ser la dedicación de sus herederos, dando por finiquitada la vida política de Hita. Y lo mejor de todo es que no se equivocaba. Dejó su cargo de concejal, de consejero en Cajamadrid, y hasta el de la Ejecutiva socialista getafense al conocerse su vinculación con el mundo del ladrillo privado (cabe aquí recordar por si alguien no lo sabe que Francisco Hita Gamarra fue concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Getafe, finalizando su labor en el año 2003).

Más sibilina ha sido la manera en la que Pedro Castro ha frenado la proyección de David Lucas, a quien promocionó desde su cargo como Jefe de Gabinete de Alcaldía y aupó a concejal de Hacienda y Seguridad en sustitución de Antonio Alonso (otro ex dedicado al ladrillo) y más aún al llegar a la primera tenencia de alcaldía. Su enfrentamiento se trasladó a la propia Agrupación Socialista local en la designación de representantes a las Ejecutivas regional y nacional. Allí Castro se erigió como “mandamás” y dejó a su “delfín” en completa minoría y buscando el apoyo de un sector de las juventudes socialistas, desencantado con la manera de hacer política de su secretario general.

Engordar para morir. Como los pavos estadounidenses con vistas al “Dia de Acción de Gracias” o los cerdos españoles cuando se acerca “San Martín”.

Castro repite y se ha encargado, a través de filtraciones en prensa local, de sugerir la necesidad de un relevo en cuanto a su segundo en la lista para las elecciones de mayo de 2007. Insiste en la necesidad de dar un papel protagonista a las mujeres y quiere una mujer para el número 2. La realidad, de nuevo, supera a la ficción. Claro que, Castro, no ha terminado de calibrar muy bien sus pasos. Porque a una mujer no va a poder hacerle lo mismo que le ha hecho a sus “segundos”.

La inteligencia femenina está por encima de la habilidad política y las maniobras de Castro en el seno de los socialistas locales. Con una fémina en el número 2 le va resultar harto difícil jugar al “me deshago de ti cuando ya no te necesito”. Claro que también está la posibilidad de que no Gobierne, con lo que el problema le quedaría resuelto con un golpe de urna; o también que su final político está más cerca de lo que parece y busca “sucesora”.

Lo cierto es que, de seguir así las cosas, ninguno de los “segundos” en los tres grandes partidos volverán a repetir puesto en relación a las listas con las que concurrieron a las elecciones de 2003. PSOE y PP se decantan (aunque todavía no es oficial y podría haber sorpresas) por una mujer para seguir a Pedro Castro y José Luis Moreno, respectivamente, en las papeletas del mes de mayo; Izquierda Unida ya ha confeccionado su lista y el anterior número 2, Ignacio Sánchez Coy, ahora es el cabeza de lista.

¿A que resulta curioso el juego político que nos puede ofrecer el 2? Pues no digamos ya el 1. Pero ese será tema de otro artículo.

martes, octubre 24, 2006

El alcalde se esconde

Llueve en Madrid y, especialmente, en Getafe. Los hace, además, sobre mojado. El fantasma de la corrupción urbanística, que sobrevuela por encima de los principales partidos políticos en la región, amenaza con dejar huella en la autoproclamada “capital” del cinturón rojo. (Menudo momento ha escogido el alcalde, el socialista Pedro Castro, para solicitar que Getafe ostente la capitalidad de Madrid…).

La figura y la actuación empresarial del ex concejal de Urbanismo, Jesús Neira, compañero socialista y amigo del alcalde, vuelve a copar páginas de periódicos, además de artículos de opinión y confidenciales en Internet.

Su nombre aparece vinculado con el supuesto cobro de comisiones por la recalificación de terrenos (una práctica considerada ilegal) en el entorno de Perales del Río, el único lugar del término municipal que queda sin explotar, urbanísticamente hablando. Nada más y nada menos que un ocho por ciento, asegura el periódico El Mundo y corrobora El País, rotativo que le acusa, además, de cobrar sobreprecio en una promoción de viviendas de El Bercial (algunas promotoras y cooperativas ya han sido condenadas por esta práctica, también ilegal, y obligadas a devolver el dinero cobrado de más, en Parla, sin ir más lejos).

Getafe de nuevo en el ojo del huracán, asegurando el portavoz popular en al Asamblea de Madrid, Antonio Beteta, la existencia de un cartel de ex concejales que “se están forrando” (sic) después de haber planificado el desarrollo del suelo en varias localidades de la región.

¿Y mientras todo esto ocurre, qué hace Pedro Castro, el máximo responsable de lo que sucede en este municipio? Esconde la cabeza, se ausenta y deja en manos de sus concejales una defensa difícilmente creíble, por lo endeble del sustento y por lo ineficaz del planteamiento.

No es la primera vez que lo hace. Cuando vienen mal dadas, allá que se larga, cierra la boca y se parapeta tras el escudo de la institución municipal, aguardando a que escampe para volver a salir como si nada, a presentar “sueños”, como les denomina y a ofrecer cifras faraónicas para éste y aquél proyecto. Lo mismo de siempre. Bueno, lo mismo no. Hace poco se le ocurrió abrir la boca para diferenciar lo ilegal de lo “no ético” y ha dejado abierta la veda para la caza del ex concejal. Un error impropio de alguien con tanta experiencia política, ¿o no? Claro que según Richard Friedman, candidato a Gobernador del Estado norteamericano de Texas, “la política es la única profesión en la que, cuanta más experiencia tienes, peor eres”.

Pedro ya tuvo que esconderse hace años, cuando uno de sus concejales fue condenado por el cobro de favores a cambio de adjudicar obras en la Concejalía de Mantenimiento (que curiosamente estaba integrada en el área de Urbanismo de la que era titular y máximo responsable Jesús Neira). No pudo aguantar la presión mediática y se vio obligado a dejar que fuese su segundo de a bordo, Antonio Alonso (que también ha sido socio de Neira en varias de las empresas del urbanista) quien pusiese la mano en el fuego por su compañero de filas. Y acabó quemándose.

No es de recibo que quien tiene la máxima autoridad y responsabilidad en todo lo que acontece en la ciudad no tenga nada que decir en situaciones de excepcionalidad. Y la de ahora, seguramente lo es. Andará pensando que su compañero Simancas le ha hecho un flaco favor al abrir la lata de los escándalos urbanísticos y la implicación política en estos turbios asuntos.

Debería dar la cara, aún a riesgo de que se la abofeteen. Para dar explicaciones a los ciudadanos y ciudadanas de por qué Getafe anda en boca de todos, de cómo sus ex compañeros han conseguido estar en la mayor parte de las actuaciones urbanísticas de la ciudad, amparándose en la legalidad de las adjudicaciones del Gobierno municipal. No es momento de silencios.

viernes, octubre 13, 2006

El socialista antisindicalista

EL OBSERVADOR publica en el mes de octubre un Editorial que no tiene desperdicio:

No es la primera vez que el concejal José Manuel Vázquez (PSOE) es protagonista de estas líneas. Ni será la última. Seguro. Se está empecinando en ser noticia día sí y día también desde hace varios meses y, apostamos, hasta el fin de la actual legislatura.

Su última cuita ha sido el enconamiento con los sindicatos de base en el Ayuntamiento, del que Vázquez es concejal delegado de Personal y Cultura. El proceso de consolidación de los puestos de trabajo ha sido el detonante de su comparecencia obligada en los medios de comunicación locales y regionales.

El citado proceso ha resultado ser un camino de espinas para el ínclito edil. Su capacidad negociadora ha quedado en entredicho y su vena autoritaria le ha servido para recibir una sentencia judicial demoledora. Su señoría le acusa de “comportamiento antisindical”. ¡Qué lástima! Que a un socialista le llamen antisindicalista. La cuna de la lucha obrera empozoñada por un concejalete de Personal.

Resulta que a la hora de abrir la mesa de negociación, José Manuel Vázquez se las ha tenido tiesas con CCOO, uno de los sindicatos con mayor representación entre los trabajadores municipales. Como no llegaban a acuerdos concretos, el responsable político tiró por la calle de en medio, rompió la baraja y firmó el acuerdo de consolidación a solas con UGT, el sindicato afín.

Sus amigos no le protestaban o, al menos, no eran un obstáculo para salir en la foto como el “conseguidor” de acuerdos. Y para alcanzar el fin no tuvo reparos en poner a su alcance los medios necesarios, aun a riesgo de que las cosas saliesen mal, como así ha ocurrido.

Una denuncia de CCOO ha llevado todo el asunto de la negociación laboral a los juzgados y estos han dado la razón al sindicato. José Manuel Vázquez es un concejal antisindical. Así lo recoge la sentencia que le obliga a contar también con CCOO a la hora de firmar acuerdos con los trabajadores del Consistorio. Es decir, volvemos al punto de partida.

Eso sí, este asunto amenaza con pasar factura a la figura del edil, ya de por sí castigada por su gestión en las áreas que le fueron confiadas a lo largo de la legislatura. Ni en Personal ni en Cultura han salido las cosas según el libro de estilo del PSOE local. Los empleados municipales de uñas, una Cultura inexistente y unos festejos populares a la altura del betún han marcado su labor.

Un currículo poco favorecedor para aportar a las quinielas de la candidatura socialista a las municipales. Ahora que Castro (Pedro, por supuesto) ha sido (auto) designado candidato a la alcaldía y teniendo en cuenta la decisión de abogar por las listas cremallera (hombre, mujer, hombre, mujer, hombre mujer…) parece que Vázquez (José Manuel) no está en condiciones de pedir . Hay ocasiones en las que es mejor ser cabeza de ratón que cola de león.

Y su nombre empieza a oirse entre aquellos a los que se les va a decir que se busquen equipo, que no tienen la confianza del míster y no van a renovar. Cultura, Deportes, Medio Ambiente… por ahí pueden ir los tiros de la renovación en las listas, siempre y cuando alguno de los primeros espadas no opte por tirar la toalla en el asunto de la sucesión y se sume a la lista de bajas. Pero este será tema a abordar en otra ocasión.

Lo cierto es que José Manuel Vázquez se ha visto envuelto en una nueva polémica que podría haber evitado de haber sacado su mano izquierda a pasear. El mismo que adjudica a dedo, que aboga por la externalización de servicios y recibe sentencias ejemplares.

Claro que, por sus obras los conoceréis.

martes, octubre 03, 2006

El ma… ma… marido de la concejala

Hay un dicho popular que reza algo más o menos así: “quien tiene un amigo, tiene un trabajo”. La facilidad con la que personas vinculadas a la res pública logran hacer hueco a amigos, parientes, compromisos y demás en puestos de trabajo relacionados con su actividad es asombrosa.

El último de los ejemplos lo encontramos en Getafe. Aquí, el cónyuge de la concejala de Juventud, Cristina González, ha sido contratado para ejercer de responsable de seguridad en la ampliación que ha llevado a cabo el centro comercial del Sector 3.

En la inauguración del citado centro comercial, hace varios días, podía verse ufano al fulano. Allí, mientras, su mujer en su condición de edil de nuestro ilustrísimo ayuntamiento, departía con unos y con otros, a sabiendas de lo segura que se encontraba en el recinto. Todo quedaba en casa.

Quien más, quien menos, tras el comentario de turno, hacían suya la ya célebre estrofa de la cantautora sevillana Raquel Winchester, con aquello de “no sabía yo que era el ma… ma… marío de la…” concejala.

Y es que no hay mejor manera de asegurarse el zurrón que tirando de cantera. Nuestra casa consistorial se asemeja a Lezama o Mareo en sus mejores tiempos. Sacar valores (nuevos o veteranos, la edad es lo de menos) se les da ahí como si hiciesen encaje de bolillos.

Eso sí, ni es el primero ni será el último de los beneficiarios por el plan de actuación en materia laboral de Pedro Castro y sus compañeros socialistas. Menudos son ellos a la hora de reducir las listas del INEM, en especial si los apellidos coinciden con algún conocido/a. Son igualitos que un amigo mío, hostelero para más señas, quien asegura contratar sólo a gente que conoce. Claro que como su agenda es cuasi infinita, la nómina que soporta cada mes borda la exageración.

Deseamos al marido de la concejala un feliz aterrizaje en el nutrido grupo de trabajadores por cuenta ajena. ¿Tendrá contrato indefinido? Seguro.

jueves, septiembre 21, 2006

De flores, vallas y otras anécdotas

Anda el Ayuntamiento preocupadísimo en adornar el municipio colocando medianas en las principales arterias compuestas a la par por hormigón y flores. Flores de vivos colores, hormigón gris, como el futuro de muchos de nuestros gobernantes. Allá por dónde se circule o camine uno se encuentra con una avenida remozada o a punto de estarlo y se percata del enorme macetero en el que están convirtiendo la ciudad. Flores que se marchitarán cuando lleguen los fríos del invierno, las heladas y demás inclemencias. Rojo y blanco, colores parecidos a los socialistas… Podrían haber optado por adornar esas avenidas con elementos más aptos para el entorno al que se van a enfrentar (vehículos añadidos) y que igualmente causan impacto visual en los ciudadanos (suponemos que esto es lo que han perseguido con tanta maceta).

Precisamente, el trabajo de remodelación de las avenidas ha sido adjudicado a la empresa Cospusa, la principal contratista del Ayuntamiento, por delante de Construcciones García y FCC (así lo apuntan compañeros de los medios de comunicación). Resulta curioso acercarse a cualquiera de los lugares donde Cospusa realiza sus trabajo para ver el lamentable aspecto que presenta el vallado que rodea su campo de acción. Vallas deterioradas hasta la saciedad, sucias, rotas, sin barrotes, ajadas, oxidadas… un peligro para los niños curiosos y traviesos, que los hay por doquier.

A uno se le ocurre que la principal contratista municipal, que ejecuta obras a diario y por las que cobra unas buenas cantidades de euros (hablamos de cientos de miles) debería cuidar su imagen externa y más aún cuando de lavar la cara al municipio se trata. No es que apueste ahora por un concurso de miss valla bonita, pero no estaría de mal que renovase el material, no van a ser todo beneficios puros y duros. Además, para amortizar el gasto siempre se puede argumentar cualquier mejora en el servicio y…

Les animo a que se acerquen a cualquier lugar en obras y comprueben por sí mismos lo que les digo (Getafe Norte, Sector Tres, Margaritas…); hay fotos que aguardan en un cajón a ser publicadas como una anécdota más de las que afloran en nuestra ciudad.

Y si no, los responsables del Mantenimiento y la Estética Urbana de Getafe, que hagan valer sus galones y obliguen a cundir con el ejemplo de mejora en la imagen. Que se ocupen de todo y no sólo de pintar el pueblo de un sospechoso rojo PSOE. Con la de colores bonitos que hay.

martes, agosto 29, 2006

La última ocurrencia de Pedro Castro

La última ocurrencia de Pedro Castro, alcalde de Getafe, anunciando su intención de solicitar para Getafe la capital de la Comunidad de Madrid ha levantado los ánimos en la localidad y en otros puntos de la región, políticamente hablando. Quien más, quien menos esperaba con interés la típica “píldora” veraniega del ínclito regidor, muy dado a marcharse de vacaciones en julio y estar al frente del carro en agosto, cuando tiene a todos los demás (Gobierno local y posición) mojándose las ideas en las playas del litoral peninsular. Pero, en verdad, que esta vez se ha pasado tres capitales, provincias y países enteros.

Castro sabe, al menos eso debería, que el debate sobre descentralización administrativa no pasa por cuestionar la capitalidad de la Comunidad, a la sazón, del Estado, sino por una implicación directa de los grupos políticos y que ésta (la descentralización) debe ir acompañada de la consiguiente financiación. Si de pedir una Consejería se trata, hay otras maneras de hacerlo.
El anuncio del alcalde getafeño ha provocado la reacción, curiosamente, de sus compañeros de partido. Mientras en el PP, tanto Gallardón como Aguirre han hecho oídos sordos a sus declaraciones, el PSM le ha desautorizado. Así de rotundo.

La responsable de política institucional y segunda de a bordo en la nave socialista, Ruth Porta, ha contestado a la demanda de Pedro Castro diciendo que la “capitalidad es algo incuestionable”. ¡Faltaría más! Un desliz del PSM en ese sentido hubiese supuesto caer en la trampa preparada por el alcalde, inconsciente, o no, de la patata caliente que ha puesto en las manos de sus compañeros socialistas.

Al margen del fondo de este controvertido asunto, hay que cuestionar la forma en la que Castro ha decidido ser de nuevo titular de portada. Con “agosticidad” y alevosía. Como si de un mensajero de Clío se tratase, ha metido la mano en la historia nacional y reclamado para sí el protagonismo que a lo largo de los siglos han tenido ciudades de la península ibérica. Qué son Mérida, Santiago de Compostela o Madrid, comparadas con Getafe… nombres escritos en los libros. ¡Lo que hay que oir!

Su falta de sensibilidad histórica le ha reportado varios tirones de orejas de afamados columnistas y su afán por satisfacer el ego informativo ha sentado muy mal en el seno de su partido.

Concejales socialistas en Getafe, aún de periplo veraniego, no han dudado en comentar la falta de tacto de su líder a la hora de poner sobre la mesa unas cartas tan complicadas, precisamente en un momento en el que el Getafe político y empresarial vive todavía inmerso en la pelea por la construcción de 12.000 nuevas viviendas. ¿Acaso es eso lo que pretende? ¿Desviar la atención? No lo parece.

Si quería que se hablase de él, lo ha conseguido. Pero si pretendía abordar un debate político, la ha pifiado, porque las burlas han sido más numerosas que los comentarios más o menos serios.
Y es que, no eran ni el momento ni el modo adecuados para hablar de capitales.

A lo mejor es que se ha confundido y no estaba pensando en las, si no en los… capitales, se entiende.

viernes, junio 30, 2006

Aguirre se pone dura

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha puesto en tela de juicio las funciones que los Ayuntamientos están aplicando a los agentes de seguridad de las denominadas “Bescam”. Es más, la presidenta ha asegurado que muchos municipios están incumpliendo el convenio de colaboración pactado con el Ejecutivo regional, mediante el cual los agentes incorporados desde este cuerpo sólo se dedicarían a cuestiones relativas a seguridad. Vamos, que han visto a los policías “apatrullando” los paseos donde hay vehículos mal estacionados, controlando el acceso de escolares a centros de enseñanza y velando por evitar el colapso circulatorio en algunas rotondas junto a grandes centros comerciales.

Aguirre no está dispuesta a que la iniciativa de las “Bescam”, para la que ha destinado esfuerzo y dinero, sea ninguneada desde los Ayuntamientos, especialmente aquellos gobernados desde la izquierda. Tal es su enfado con el papel que juegan los policías regionales, que ha sido la primera en llamar a capítulo a varios alcaldes del PP. Para que cunda el ejemplo. Es más, para vigilar que se cumpla todo aquello que se ha firmado, no ha dudado en crear una Dirección de Seguridad que se encargará de hacer seguimiento de los agentes que refuerzan las plantillas propias de los Consistorios. No quiere que nadie “juegue” con este asunto.

¿Y en Getafe?

Desde el Ayuntamiento se asegura que el convenio se cumple con creces. El concejal de Seguridad, David Lucas, cifra en un centenar los agentes que a diario se dedican a labores de seguridad ciudadana, casi la mitad de los integrantes de la plantilla. A pesar de ello, hay voces discrepantes y quienes afirman tener “fichados” a los “bescam” que hacen de reguladores de tráfico.

En cualquier caso y dados los antecedentes, es lógico poner en duda las aseveraciones del concejal. Quejas por el destino de los nuevos policías de Seguridad Ciudadana han surgido desde el mismo momento que pisaron el municipio.

La primera de las protestas estuvo relacionada con los nuevos vehículos, los de color rojo y azul. Decían que sólo salían a patrullar de noche para que el efecto de estos nuevos coches no causase impacto visual entre los vecinos y vecinas de la ciudad. Modelos modernos y tan llamativos, frente a los usados ya por la Policía Local causan una comparación inevitable.

Poco después y ante la rotulación de dichos vehículos, tanto coches como motos, el Ayuntamiento ha ampliado el número de emergencias que figura en la carrocería, ya que la Comunidad sólo había incluido el 112 para emergencias. Getafe decidió añadir el 092 para “cumplimentar” las opciones; eso sí, de tamaño mucho mayor que el rotulado en origen.

Amén de las triquiñuelas con el uso y destino de los nuevos vehículos y policías, lo cierto es que la incorporación de las “Bescam” ha servido para que Getafe incumpla el convenio por otros motivos. Los sindicatos policiales denuncian que desde hace dos años no se ha creado ni una sola plaza policial con cargo a los presupuestos municipales, ni siquiera se han cubierto las de aquellos agentes jubilados”.

De estas acusaciones se desprende que el proyecto regional de Seguridad Ciudadana le ha venido a nuestra localidad o, al menos, a los responsables municipales, como agua llovida del cielo. De ahí que el propio Lucas no haya tenido más remedio que reconocer que está “satisfecho” de los resultados de la incorporación de los agentes de las “Bescam”.

Eso sí, con flores o sin flores, con reconocimiento o sin él, desde el Gobierno regional se va a seguir con lupa la actuación de los policías y, en especial, el dinero que desde Madrid se destina a municipios como Getafe.

En materia de seguridad sería importante y aconsejable que nadie intente sacar ventaja política. Por muy difícil que a algunos les resulte.

Candidatos a candidato

Las elecciones municipales del mes de mayo del año próximo van a poner mucho en juego en nuestra localidad. De ahí que las tres formaciones políticas con representación en el Ayuntamiento (PSOE, PP e IU) hayan puesto sus miras en esa fecha como punto de referencia obligado a la hora de trabajar. Pero antes de saber qué se cocina en la trastienda de cada partido, es de suma importancia conocer quién va a ser el encargado de dirigir el ritmo de los fogones. Los candidatos serán la imagen visible de cada formación y quienes marquen la pauta a seguir, no sólo a sus afiliados, sino a toda la ciudadanía, pues ella será, en definitiva, la que tendrá la última palabra en la cita con las urnas.

Ha sido Izquierda Unida la primera formación en dar a conocer su cabeza de lista para esas elecciones locales. Ignacio Sánchez Coy, actual portavoz de la coalición en el Ayuntamiento de Getafe, va a suplir a Laura Lizaga en los carteles. Coy ha contado con el apoyo casi unánime de IU en el municipio y ya ha empezado a trabajar para marcar las directrices del programa con el que piensa concurrir a los comicios.

Si de apostar se trata, y por mal que nos parezca, no arriesgamos mucho al apuntar que no habrá imagen femenina en el primer puesto de la lista de ninguno de los partidos. La presencia de Lizaga en las elecciones de 2003 hay que entenderla, pues, como un intento de lo que pudo ser y no fue a la hora de encontrar una alcaldesa para una de las ciudades más importantes de la corona sur metropolitana.

Los esfuerzos, en este sentido, se centran en acoplar mujeres en los segundos puestos. Y ahí es donde han empezado a surgir múltiples conflictos internos, con el baile de concejales que no están dispuestos a perder su estatus actual a costa de cumplir con la paridad que desembocará en las denominadas listas cremallera.

Con este panorama resulta evidente que quienes rigen ahora los destinos de los principales partidos en Getafe sean los que más papeletas tengan a la hora de volver a ser candidatos por sus respectivas formaciones. ¿Seguro?

En el PSOE el sempiterno Pedro Castro ya trabaja para volver a caer de pie en 2007. Pese a las críticas externas e internas que ha despertado su gestión en esta legislatura (incluso sus militantes reconocen que poco a nada se ha hecho en estos últimos cuatro años de mandato socialista) queda poco tiempo para “vender” a la ciudadanía otra cara que no sea la del actual primer edil en el cartel electoral del puño y la rosa.

Además, los inciertos resultados que han arrojado las últimas encuestas que se han hecho públicas en la ciudad han servido para generar más incertidumbre en las filas socialistas, temerosas de lo que podría significar perder el poder, no sólo para los cargos electos, sino para todos aquellos militantes que, de una u otra manera, se han refugiado a la sombra del carro del mandato castrista para vivir de los recursos de “papá ayuntamiento”.

Para Pedro Castro sería un auténtico desastre abandonar la política después de haber perdido unas elecciones, pero más desastroso aún sería para el PSOE dejar la segunda planta de la Casa Consistorial por haber cambiado de candidato. No obstante, en la calle Cuenca afirman manejar unas encuestas en las que aparecen como ganadores de las elecciones con la mayoría suficiente para no hacer uso de Izquierda Unida como socio obligatorio de gobierno ¿?

Por su parte, la apuesta del Partido Popular por Getafe está clara. Nunca han estado tan cerca de poder morder la roja manzana del ayuntamiento y desde Génova han decidido volcarse, después de que la mismísima Esperanza Aguirre pusiese a Getafe, entre otras localidades, en el centro de la diana a la que van a disparar los populares.

La campaña de imagen de José Luis Moreno y su trabajo constante de desgaste del Gobierno municipal está haciendo mella en el municipio. Es más, en diferentes ocasiones es el propio Gobierno el que ejerce de oposición a la oposición, al ir a remolque en denuncias y peticiones.
En otras localidades de la Comunidad de Madrid en las que el PP puede hacerse con la alcaldía, arrebatándosela a los socialistas o en las que las encuestas, pese a gobernar, no les son del todo favorables, los populares van a apostar por primeros espadas. Hay quien habla de Isabel Tocino o Carlos Mayor Oreja para aparecer en la foto de dos carteles electorales municipales.

En Getafe todavía no ha sido designado el cabeza de lista del PP, partido en el que sólo se ha designado por aclamación a Esperanza Aguirre en la Comunidad, algo más que evidente dado el importante peso específico que la presidenta tiene en el partido, no sólo en Madrid, sino a nivel nacional. No parece que Moreno quede fuera del cartel en Getafe, pese a algunas voces que lo ponen en duda. Y menos después de ver los resultados que han hecho públicos recientemente y en los que los populares saldrían vencedores si las elecciones se hubiesen celebrado ahora.

Los candidatos a candidato (a excepción de Ignacio Sánchez Coy, que ya ha superado ese proceso) deberán esperar hasta después del verano para que se hagan oficiales sus nombres como aspirantes al sillón de la alcaldía. Hasta entonces, las especulaciones van a ser caldo de cultivo en el entramado social, económico y político de la localidad. Eso sí, sólo ellos y su trabajo van a estar en posesión de la verdad.

viernes, mayo 19, 2006

El neoliberalismo según PC

Resulta alarmante la camaleónica capacidad de los políticos para adecuar sus actuaciones a las tendencias sociales, más allá de sus ideas y de aquello que pregonan como raíz última de su entelequia. La simbiosis llega a ser total en según qué circunstancias y sobre algunos asuntos concretos. Así, son socialistas, socialdemócratas, liberales, comunistas… y siempre procuran caer de pie. Usan la direccionalidad (derecha, centro, izquierda, centro derecha, centro izquierda) con una ambigüedad que bordea en ocasiones lo éticamente incorrecto.

En Getafe asistimos en los últimos meses a un claro ejemplo de traslocación política. Desde el PSOE se publicitan acciones que nada tienen que ver con sus actuaciones en la localidad. Sin ir más lejos, la política privatizadora de Pedro Castro y sus concejales ha provocado un auténtico revuelo, no sólo en el Gobierno municipal, donde camina de la mano de Izquierda Unida, sino en el entorno social getafense, que es donde más daño hacen las decisiones de quien gobierna.

Pero Castro se ha pasado a todo el mundo por debajo de su manto progresista y ha tomado decisiones más próximas a las ideas liberales. El denominado “neoliberalismo”, que desde las filas socialistas tanto se critica y se aplica en los comentarios y declaraciones públicas relacionadas con el PP, tiene en esa política privatizadora un importante caldo de cultivo.

Y aquí, PC tiene mucho que decir en todo este asunto, aunque no sea el único impulsor de la corriente privatizadora que invade los estamentos del Ayuntamiento getafense. Bien es cierto que lo que desde el PSOE se prefiere denominar “gestión indirecta” no es si no una externalización de servicios o privatización bien entendida (a fin de cuentas es una empresa privada la que se hace cargo de la gestión de equipamientos e infraestructuras municipales). Y otras ciudades “amigas” en la zona sur también gobernadas por los socialistas (con y sin apoyo) llevan tiempo aplicando políticas de gestión indirecta en muchos de sus servicios.

Uno de los que han defendido esta práctica privatizadora con más vehemencia dentro del Gobierno municipal ha sido Santos Vázquez, concejal de Urbanismo y Medio Ambiente. Su anterior experiencia como responsable del Deporte municipal le ha puesto en contacto con muchos gestores que, desde la iniciativa privada, han garantizado éxitos en una forma mixta de control de instalaciones y equipamientos públicos. Es ese modelo el que quiere trasladar a Getafe, con la aquiescencia de Pedro Castro, sabedor de lo que opinan otros alcaldes del PSOE.

Vázquez propició en su día la privatización de las piscinas en Getafe Norte y ahora es uno de los máximos responsables de que se repita la historia en el nuevo complejo del Sector Tres. De hecho, ya se ha aprobado en Junta de Gobierno la adjudicación de los servicios médicos y de control de aguas del citado polideportivo. ¿Para qué está el laboratorio municipal? ¿No sería lógico que ese departamento se encargase de velar por la calidad de las piscinas públicas?
Pero hay más. La negativa de IU a aprobar la privatización del mantenimiento de parques y jardines en diversas zonas del municipio ha llevado al PSOE a aprobarla en Junta de Gobierno, donde es mayoría. Un paso de esa adjudicación por el Pleno con la oposición de IU y PP hubiese derrotado a PC y sus concejales, algo que no pueden permitir tal y como está la partida en estos momentos. Hubiese significado tantas cosas…

Lo cierto es que los vecinos de los barrios de Cerro Buenavista, Perales del Río y El Bercial van a ver jardineros de la empresa Medio Ambiente Dalmau S.A. trabajando en sus zonas verdes. Los siete votos de los concejales del PSOE en esa Junta de Gobierno se impusieron a los dos votos con los que contaba y cuenta IU.

La empresa pertenece a Acciona (una de las más importantes constructoras nacionales) y se integró en dicho grupo después de la fusión de Cubiertas MZOV (que compró la práctica totalidad de las acciones a José Dalmau, su anterior propietario) con Entrecanales. Su sede social está en Valencia, aunque en Madrid cuenta con una delegación en San Sebastián de los Reyes.
Por el contrato de Getafe, Medio Ambiente Dalmau se va a embolsar casi tres millones y medio de euros por un trabajo de dos años de duración. Y en estos 24 meses, los empleados de Parques y Jardines del Ayuntamiento tendrán menos terreno para abonar y muchos más motivos para protestar.

Las maniobras de PC han salpicado también a los agentes sociales del municipio. La división entre CC OO y UGT ha quedado en evidencia con el posicionamiento de este último sindicato con el PSOE. Un cruce de comunicados ha dejado ver que la política privatizadora del Ayuntamiento de Getafe también encuentra acomodo en determinados sectores de la izquierda progresista.
Para cerrar el círculo a estos ejemplos de “gestión indirecta” hay que asomarse a la concejalía de Cultura, donde su titular, José Manuel Vázquez, anda dándole vueltas a la privatización del programa de fiestas a cambio de euros que sufraguen la falla de la semana grande o el desfile de carrozas. Y tampoco le importa poner en marcha un proceso irregular, esquivar la línea política que propugnan las siglas de su partido, y adjudicar a dedo a una empresa privada servicios que deben ser municipales.

El PP ha decidido sacar partido de este contrasentido y se ha apuntado al carro de las críticas. Y el PSOE se enfada con su socio de Gobierno porque, según dicen algunos de sus más cualificados representantes, a raíz de las noticias difundidas por IU en las que ha mostrado su rotundo rechazo a la privatización de servicios, desde la coalición se les ha puesto a los pies de los caballos.

Quizá les hubiese ido mejor privatizando el Gobierno. A los ciudadanos, seguro.

martes, abril 04, 2006

La ligera pluma del concejal

Mientras el alcalde, Pedro Castro, le ha retirado la firma a la concejala de Medio Ambiente, Sandra Escudero, por problemas de partido y lo justifica con unas declaraciones difícilmente creíbles, el edil de Cultura, José Manuel Vázquez, anda metido en problemas por culpa de una pluma liviana, en exceso ligera.

Vázquez, ni corto ni perezoso, ha adjudicado a dedo la privatización del programa de fiestas y se ha tomado la molestia de firmar una carta en la que sugiere a los comerciantes de Getafe a que colaboren con la empresa que tiene previsto editar la publicación. O sea, desfachatez por partida doble.

El concejal ha permitido a una empresa editorial el uso del escudo del Ayuntamiento para publicitar un producto comercial privado, ha firmado un contrato sin contar con el visto bueno de la secretaria del Ayuntamiento, ni con la Junta de Gobierno local (solidaria, por cierto, de los errores del concejal) en el que, además, no coinciden los ejemplares con los que ofrece la empresa a los comerciantes y participa directamente del fraude. Y para intentar salir del atolladero piensa poner en marcha un concurso que legitime el proceso. Algo que ya ha nacido viciado y que no tiene visos de solución, por la actitud negligente del responsable de la Cultura en nuestro municipio.

Si tuviera sensatez, dimitiría. Por amparar actuaciones que benefician a una empresa determinada en detrimento de otras; justo lo contrario del mandato exigido por los ciudadanos y ciudadanas de Getafe cuando le eligieron como cargo público: velar por el bien general, por coaccionar a los comerciantes a través de una carta con su firma, por tomar decisiones arbitrarias.

Debería dimitir.

El embrutecimiento de una ciudad

Resulta increíble cómo un Gobierno, en este caso municipal, es capaz de poner patas arriba todo un municipio. Los responsables políticos responden, a cada problema, con otro más grande; a cada información, con declaraciones sonrojantes; a cada protesta, con amenazas veladas; a cada acusación, con huidas hacia adelante; a cada sugerencia, con demagogia; y a cada necesidad, con ignorancia.

Getafe es, políticamente hablando, una ciudad descabezada. Resulta escandaloso asomarse a las páginas de los periódicos locales y ver las informaciones que, una vez sí y otra también, ponen en tela de juicio la actuación de nuestros gobernantes, a quienes, en algunos casos, se les vinculan con presuntos delitos y posibles tratos de favor.

¡Menudo panorama!

Han sido, las últimas, unas semanas de auténtico caos, de embrutecimiento de la ciudad, en el sentido más literal del término. Y quienes deben velar por que las aguas bajen tranquilas, son quienes más se ocupan de revolver el río. Y ya lo dice el refrán: “A río revuelto, ganancia de pescadores”. Por lo que hay quien se ha venido ocupando durante los últimos años de tener la caña más larga y dejar atada y bien atada su barca en los mejores cotos de pesca del municipio, algo que con toda seguridad no es ético y quién sabe si será legal.

Diferentes afirmaciones públicas de los primeros espadas del PSOE local han dejado auténticas bombas de relojería en el entorno urbanístico, social y mediático de la localidad. Unas declaraciones que no han estado marcadas, ni mucho menos, por la prudencia que se le debe exigir a un cargo público. Mensajes con doble sentido que no han hecho más que enredar la ya de por sí complicada situación por la que atraviesa Getafe.

Y además, se toman la libertad de asegurar que los periodistas no se preocupan por cuidar la objetividad. Ellos, con manifestaciones tendenciosas y seguramente intencionadas, se permiten el lujo de abanderar el espíritu de la libertad de expresión. Y los inveraces son los demás… a quienes no se cortan un pelo en vetar si no responden a sus intereses y pasan por el tamiz de “su verdad”.

El ciudadano de a pie, ése que sólo pasa por el entorno de la calle Madrid y de la plaza de la Constitución en fines de semana y cuando el tiempo lo permite, está harto de tanta chapuza, de tanta información cruzada y de tanta confusión. Y pide claridad, algo que no encuentra por ningún lado.

Sus gobernantes no les están dando el mejor ejemplo de seriedad y de dedicación a la “res pública”, embutidos como andan en diatribas mediáticas y en desmentidos y respuestas a las informaciones aparecidas en los medios de comunicación locales.

Perdidos al otro lado de la niebla.

Todo este abotargamiento de la vida municipal nos conduce a una situación de desgobierno, de desmesura y de descuido de otras funciones. Los vecinos y vecinas son los que, en definitiva, pagan el precio de la ineficacia y quienes sufren la falta de tino a la hora de proporcionarles lo que ellos demandan: tranquilidad.

lunes, marzo 20, 2006

Perales es lo que tiene

Problemas, problemas, problemas… al hablar de Perales del Río, en Getafe, la inmensa mayoría de medios de comunicación se hacen eco de quejas vecinales, reivindicaciones ecologistas, escasez de dotaciones, abominables infraestructuras pegadas al barrio, lodos, vertidos ilegales, mosquitos… Sin ir más lejos, este periódico recoge las quejas ecologistas por el uso de armas químicas en La Marañosa y el acuerdo para la construcción de un campo de golf en suelo protegido. Casi nada.

El panorama no pinta nada halagüeño para unos vecinos que llevan años de luchas y reivindicaciones que hasta el momento no han servido para mucho. Se sienten, y no es para menos, abandonados por su Ayuntamiento.

Pero Perales del Río tiene algo más que todo eso, algo que va a marcar la política municipal en los próximos años: muchísimo suelo disponible.

Con la madre del cordero atada y bien atada, no extraña que el PSOE apueste en esta zona del municipio por un modelo de gestión de suelo que critica y niega en otros lugares y que se hartan de condenar Simancas y los suyos en la Comunidad: la Compensación.

¿Por qué el futuro desarrollo urbanístico de Perales del Río se va a aprobar (así lo pretenden los propietarios de suelo y las altas instancias municipales) por Compensación y en otras zonas como Molinos y Buenavista se ha aferrado Pedro Castro a la bandera de la expropiación como si fuese un clavo ardiendo? Una respuesta que puede estar en la titularidad de los terenos.

Los socios de Gobierno del PSG (Partido Socialista de Getafe) han avisado que en Perales apuestan por expropiar, como modelo más cercano a sus propuestas de izquierda. Y a tenor de cómo se presentan las encuestas previas a las elecciones, han empezado a sonar las alarmas para acelerar el proceso de desarrollo en Perales del Río. No vaya a ser que alguien quiera torpedear un negocio inmobiliario altamente rentable, para algunos.

Son estas diatribas las que tienen enfrascados y atareados a los munícipes que nos gobiernan, mucho más que las necesidades vecinales, que maquillan con mociones plenarias, solicitudes, exigencias y demandas a las otras Administraciones (fundamentalmente a la regional, del PP).
Porque Perales es lo que tiene: suelo, mucho suelo.

martes, febrero 07, 2006

La política urbanística municipal funciona con dos varas de medir

El Ayuntamiento de Getafe ha aprobado, con la abstención del PP, lo que han venido a llamar “monetarización” del aprovechamiento urbanístico en Planeamiento Urbanístico del ámbito de actuación remitido AA.01 El Rosón del PGOU de Getafe, que es gestionado mediante el sistema de compensación.

En concreto, el diez por ciento del suelo, que vende a los propietarios de la Junta, algunos de ellos ex concejales socialistas de Getafe, al precio de 1.140 euros cada metro cuadrado. Hay quien dice que el Ayuntamiento ha dejado de ingresar dinero y que, por ende, los ex socialistas se lo han ahorrado, pues el precio de ese suelo ronda ya los 2.000 euros el metro. Ahí se van a construir 2.400 viviendas en la zona noroeste de la ciudad, junto a los desarrollos de Kelvinator y El Bercial.

Pero al precio del suelo hay que sumarle muchas más cosas:

El sistema elegido para el cambio de uso de suelo y su posterior transformación en áreas de viviendas choca abiertamente con la idea que desde el Ayuntamiento se está trasladando respecto a sus actuaciones en otros desarrollos planificados. Independientemente de las especiales características del ámbito en el que se actúe y de la facilidades o dificultades que se puedan encontrar a la hora de poner en el mercado las viviendas, es del todo claro que desde el Consistorio se aplican dos varas de medir en su política urbanística. Y ahí tiene mucho que ver la titularidad del suelo que se pretende transformar.

Se ha hartado de decir nuestro Gobierno municipal (a través de una campaña de publicidad institucional en medios de comunicación locales en octubre y noviembre de 2004) que está tremendamente preocupado por dar “satisfacción a los ciudadanos en su demanda de vivienda protegida” y en esa línea “entiende que sólo el concurso público garantiza la igualdad de oportunidades de todos los demandantes de vivienda protegida, en las mejores condiciones de precio y calidad”.

Y es aquí donde nos preguntamos: ¿es que los demandantes de vivienda protegida que busquen las mejores condiciones de precio y calidad no pueden residir en El Rosón? Un desarrollo urbanístico en el que se van a constituir hasta ocho Juntas de Compensación diferentes que permitan poner en el mercado alrededor de 2.400 viviendas.

Pero hay más. En la idea del nuevo parque residencial hay truco añadido. Hablan los nuevos propietarios del suelo que su idea pretende sacar del anquilosamiento a un área industrial totalmente degradada y transformarla en un conjunto residencial de primera línea. De ahí que, según manifiestan, las industrias de El Rosón saldrán a otras zonas de la ciudad. Pero no.

Casi todas las empresas con fachada a la carretera de Toledo van a seguir donde están: Automóviles Uceda, Azulejos Peña, Ford Mundomotor, Hyundai, Alteconsa, Rocinsa... van a seguir formando parte del entramado industrial de esa zona de la ciudad, aunque se les obligará a hacer importantes modificaciones en sus instalaciones. Y si ahora nos dicen que El Rosón es un núcleo atípico rodeado de áreas residenciales, ¿qué pasará cuando estas industrias tengan adosadas 2.400 nuevas viviendas?

A ti sí, a ti no

Pero volvamos a la cuestión principal. Después de la puesta en ejecución del polígono El Bercial Universidad, que se desarrolló por Compensación, el Gobierno municipal, en voz de su concejal de Urbanismo, Francisco Hita, aseveró que “ningún desarrollo más” se haría por ese sistema. Y el Gobierno municipal esgrime como bandera la aprobación del Consorcio público para la construcción de 10.000 viviendas en los ámbitos conocidos como Los Molinos-Buenavista (el primero, junto a la estación de El Casar en la zona norte y el segundo en los límites del Sector 3 con la vecina ciudad de Leganés). ¿Y El Rosón? Ahí no toca. Sus ocho Juntas de Compensación van a ser todo un claro ejemplo de la disyuntiva urbanística.

Y qué decir de Perales del Río. El convenio del campo de golf, donde se permutan terrenos rústicos (que bien podrían ser expropiados al precio que marca la Ley) por la cesión de uso de suelo residencial para la construcción de 400 viviendas libres marca un hito en el planeamiento urbanístico local. Lo que algunos han denominado “pelotazo” (en clara concordancia con el deporte de los palos) nos puede dar una idea de cuáles son las previsiones para esa barrio.

De momento, Izquierda Unida, socio de Gobierno de los socialistas ha pedido en repetidas ocasiones que “el desarrollo urbanístico de Perales del Río, donde se levantarán 12.000 viviendas se ejecute mediante el sistema de expropiación, como único aval para garantizar el acceso de los getafenses a una vivienda de protección pública. Santos Vázquez, concejal de Urbanismo, ha querido matizar en algunas de sus intervenciones relativas a Perales que para la construcción de equipamientos e infraestructuras la Compensación es un sistema más adecuado ¿?, abriendo la puerta a ese modelo de gestión.

La patata caliente de la política urbanística local sigue en el tejado de quienes la desarrollan, y que como dicen son “los únicos legitimados para ello”. Las explicaciones de porqué hacen lo que hacen deberán dárselas a los vecinos. Y esperamos que así sea siempre.

jueves, enero 19, 2006

El alcalde Juan Simón

Nada bien deben marcharle las encuestas al PSOE de Getafe, cuando su secretario general y alcalde de la localidad, Pedro Castro, a quince meses vista de la celebración de las elecciones municipales se apresura a anunciar el estudio “informativo” para el soterramiento de la Autovía a Toledo (A-42) a su paso por esta localidad. No parece todavía momento de gastar una bala tan importante como esa para presentar el inicio de una idea que cuando tome cuerpo y forma habrá pasado mucho tiempo, más del necesario, como ocurre siempre en estas situaciones.

Oportunidades temporales al margen, la concatenación de factores en una ciudad como Getafe en la que el Gobierno local anda día sí y día también en el ojo del huracán, no dejan otra salida al “jefe”. Como el “enterrador” de la copla que hiciese popular Antonio Molina, el “Juan Simón” de la zona sur vuelve a oficiar de sepulturero urbanístico y ofrece a sus vecinos la idea de poner tierra sobre el asfalto de la A-42. Tierra y ladrillos, a buen seguro.

Castro, ni corto ni perezoso ha ido al Ministerio de Fomento a hacerse la foto… con Simancas (¡qué cansino!) en una nueva aparición pública de las muchas que han protagonizado los dos socialistas en los últimos quince días. Y lo ha hecho aún a sabiendas que será Getafe, sólo Getafe, la encargada de poner la “pasta” si quiere seguir adelante con la idea.

Ya lo dijo la ministra, Magdalena Alvarez, y así se ratificó en el protocolo de intenciones firmado hace ocho meses. Fomento “da permiso” a Pedro Castro y su equipo de concejales para que haga con la Autovía de Toledo lo que buenamente quiera, pero de aportar… ni un euro.

Y aquí empieza el lío.

Castro se “hartó” de criticar al Gobierno del PP cuando declinó financiar el enterramiento de la vía del ferrocarril. Francisco Alvarez Cascos, por aquel entonces, titular de Fomento, fue quien se llevó todas las “lindezas” del Gobierno getafeño. ¿Y ahora? Será que la señora Magdalena Alvarez (¡hay qué ver con el apellido)!, mucho más guapa que Cascos (eso, por descontado) es del PSOE, y por eso…

El ínclito alcalde asegura que no “quiere meter en el compromiso” ni a Fomento ni al PSM (Partido Socialista de Madrid), pero sí ha pedido colaboración a la Comunidad de Madrid. ¡Tan fresco! Es del PSOE y el PSOE le ha dicho que no va a sufragar la obra. Y no sólo no lo critica, sino que acuden juntos a presentar el estudio. ¿Y el PP? ¿Y su socio de Gobierno local, IU? No fueron invitados. Qué descortesía.

Conseguir la friolera de 150 millones de euros para que los coches pasen por debajo del municipio de Getafe no va a ser nada sencillo. Está claro que tal cantidad de dinero no llega sino de plusvalías por la venta de suelo. El mismo suelo que se liberaría al soterrar la autovía. Viviendas, oficinas, centros comerciales y otras instalaciones similares tienen cabida en los 4 millones de metros cuadrados de suelo que podrían quedar en superficie. ¡Menuda tajada!

Juan Simón, perdón, Pedro Castro ha afirmado que no se harán viviendas en esa operación, pero nada ha dicho de otras edificaciones como las anteriormente descritas y en las que se van a cruzar muchos intereses públicos y privados.

Es por todo eso que, con tanto tiempo para la elección del nuevo alcalde y de los nuevos concejales, llame la atención la puesta en la escena pública de este nuevo “invitado” al baile político en Getafe.

viernes, enero 13, 2006

El PSOE contra Güemes

No sabe el PSOE por dónde hincarle el diente al Gobierno popular de la Comunidad de Madrid. O mejor dicho, no sabe cómo hacer para aparecer en portada en los medios de comunicación. El último en agarrar el ariete y andar a arreones ha sido el portavoz Rafael Simancas. Y lo ha hecho pidiendo la dimisión de los consejeros de Empleo y Mujer, Juan José Güemes y de Vivienda, Mariano Zabía.

Algo debe tener Güemes que sus adversarios políticos temen. No es la primera vez que el PSOE dirige su artillería contra el titular de la Consejería de Empleo. Hace varias semanas fueron los alcaldes del sur al completo los que quisieron ponerle en entredicho. Y claro, como esa estrategia falló (no lograron su objetivo de ponerle en el punto de mira de la opinión pública, antes al contrario), ahora es su “jefe de filas” el que vuelve a la carga.

Entre todos (portavoz, diputados, alcaldes y concejales) están haciendo “famoso” al “primo del Zumosol” (como le calificó el concejal de hacienda en Getafe, David Lucas), que se está “hinchando” a aparecer en medios de comunicación con las iniciativas y actuaciones en materia de Empleo y Mujer. Al poner su gestión en entredicho, el PSOE no hace sino reconocer todo lo que la Comunidad aporta a estos dos asuntos tan sensibles para la sociedad.

Además, la estrategia de Simancas al cargar contra los consejeros choca frontalmente con sus aspiraciones en Madrid. Su “enemigo” (en este caso, enemiga) es Esperanza Aguirre, la actual presidenta. Si aspira a arrebatarle el sillón no puede, o no debe, pisar escalones inferiores. Su obligación, como “jefe” de la oposición es seguirle los pasos a Aguirre, ponerse a su altura y pelear de “tú” a “tú” por decantar de su lado la opinión de los madrileños.

Cuestionando a sus “peones” (en este caso, consejeros) deja vía libre a la presidenta para elevar sus miras en Ferraz a las plantas superiores, donde se toman las decisiones a nivel nacional. Y ese es un caramelo demasiado apetecible como para que Esperanza Aguirre no haya dudado en darle cuantiosos bocados.

Las críticas de Simancas contra el consejero de vivienda ponen también en tela de juicio la política urbanística que el PSOE mantiene en algunos municipios donde gobierna, como es el caso de Getafe. La aprobación de un Consorcio entre la Comunidad y el Ayuntamiento getafeño para la promoción y desarrollo de 12.000 viviendas en dos sectores del término municipal les va a hacer caminar de la mano durante varios años, pagando por los errores que esta decisión política les acarrera.

El líder del PSM no debería encender más hogueras de las que ya arden por Madrid, no vaya a ser que tarde o temprano decida poner la mano en el fuego por algún compañero y acabe quemándose.

Y más aún porque, mientras Simancas sigue con su particular pelea “anti consejeros”, los aludidos no hacen sino subir enteros en la particular escala político-afectiva de la “jefa” de los populares madrileños. Favor que les hace.